EPISODIO XI

9 DE OCTUBRE DE 2018

En la vida todo es cuestión de percepción. Y en eso los políticos son expertos. Por eso es por lo que tenemos lo que tenemos. En realidad, yo pensaba que tener a Pesquera diciendo barrabasadas sobre la supuesta “seguridad” que tenemos en esta isla era suficiente. Pero no, siempre hay alguien que quiere ser más bruto, o quiere decir cosas para hacer creer que dicen la verdad.

Siempre he dicho que la gente se cree que, si dice una mentira muchas veces entonces, por arte de magia, se convierte en una verdad. En la administración actual de esta bendita isla eso es normal. Han dicho tanta mentira, en especial en estos últimos trece meses, que ya la mentira se ha institucionalizado. Algo parecido a nuestra época de finales del milenio pasado donde el robo gubernamental era la orden del día.

Hay quienes tienen más éxito en el robo y la mentira que otros. En los noventa encarcelaron a más de cuarenta funcionarios públicos por corrupción. Mucha gente no recuerda o no quiere recordar eso. Después de todo, la excusa era que había obra. Pasaron los años y ha habido muchos que no aprenden y caen en lo mismo. Por desgracia de nosotros como pueblo, es que pueden ser buenas personas los que entran a la política, pero el sistema se los traga y terminan siendo peores que los anteriores.

Sin embargo, después de los huracanes, no sólo la economía del tumbe proliferó. Si no que también, la difusión de mentiras o verdades a medias. El problema que estoy viendo es que a nadie le importa. ¿En serio vamos a caer en eso? Y vamos al caso de hoy.

Ya sabemos que Pesquera es un sueldo botado. Y no es barato. Cuando tu le pagas a un funcionario $248,500, tiene que ser Superman. Después de todo, esa no fue la excusa para pagar esos salarios. Y parafraseo; “hay que buscar el mejor talento posible para que trabaje por este país, y esos recursos no son baratos”. Hay un problema, nadie, nadie, NADIE, evalúa o quiere evaluar a los que desempeñan esas posiciones.

¿Pero qué podemos esperar? ¿Qué el gobernador los evalúe? Estoy pidiendo mucho. Su gabinete tiene más polilla y comején que un árbol de flamboyán.

Pero vamos al otro caso, al superintendente de la policía municipal de la capital le dio la misma cosa. El dijo que los problemas de criminalidad en San Juan es un asunto de percepción. ¿En serio, loco? Me imagino que ya la edad lo tiene que estar afectando. Para sustentar su punto, indicó que las estadísticas de criminalidad están más bajas en comparación al pasado año. Y en ese punto tengo un problema.

Y el problema es; ¿desde cuándo las estadísticas de la policía son confiables? ¿Recuerdan un pequeño detalle? En los cuarteles no hay policías que atiendan querellas, y si no atienden querellas, pues entonces no pasan a los libros de incidencias, y si no pasan a los libros de incidencias pues no pasan a ser parte de las estadísticas. No creo que sea muy difícil entender eso. Pero como quiera, aquí quieren manipular la percepción publica basado en lo que le conviene y no en una realidad. Y cuando eso ocurre, tomamos decisiones equivocadas, porque las premisas son equivocadas. Por eso estamos como estamos.

Hoy el gobernador se fue a hacer un “meeting” político al Condado. Después de todo, si la alcaldesa no hace nada, pues entonces él se va a empantalonar y va a supervisar los esfuerzos de seguridad en el área. Obviamente, no fue solo. Y se llevó a todos los periodistas y relacionistas públicos posibles para que difundieran como el “gueto” de la alta sociedad le agradecía su gestión y le daban una biblia para que el Ser Supremo lo dirigiera en sus esfuerzos.  Después de todo, no puede contar con Pesquera porque ayer dijo que no sabía como trabajar con la crisis de la policía.  ¿Y se preguntan porque digo que su salario es uno botado?

Las casualidades no existen. Y están invitados a atar ese acto con lo que ocurrió en los Estados Unidos con la confirmación de Kavanaugh y la próxima aprobación acá en Puerto Rico del Código Civil.

Pues eso querías, eso tienes. Y como vamos, lo vamos a seguir teniendo.

Un párrafo para la alcaldesa. En realidad, hay que chavarse con ella. Ella se busca las cosas que le pasan. Esos hematomas son innecesarios. Y le esta dando todas las fichas para que en un futuro pase una de dos cosas; o la oposición le demuestre que es una incapaz y una pésima administradora o que, aunque lo anterior es correcto, la administración futura sea algo peor. Aunque quizás puede ser mejor. Todo es posible en este mundo. Nada, para la alcaldesa lo importante es la reestructuración de su partido. Digo, si es que esa cosa se puede reestructurar.

Lo más gracioso o trágico es que el encargado de tumbarse un billete, perdón, por promover la isla en el extranjero para atraer turismo dice que van a tener números históricos con relación a la actividad económica de esa industria. Su estrategia, promover el mejoramiento de las áreas devastadas por el huracán María y la seguridad de la isla para los turistas. Claro, cuando en estos últimos meses han cogido de relajo violar a turistas, y sin policías, pues entonces no creo que su gestión y sus intenciones puedan ser logradas. Otro invento que nos cuesta aproximadamente $30 millones que al final, si es que no hacen otras cosas que mejoren el ambiente y la calidad de vida de los pobladores del país, pues es dinero botado.

Hay que orar y mucho.

Pero eso queríamos, eso tenemos.

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