5 DE OCTUBRE DE 2018
Hoy hay lluvia. Mucha lluvia. Hay tanta lluvia que durante el día no ha pasado absolutamente nada importante. Fuera de la audiencia que le dieron a Papá Mesías en Colorado que fue una pérdida de tiempo porque les dijeron lo mismo que le habían dicho hace par de semanas atrás; “si quieres votar por el presidente, hay cincuenta estados para que lo puedas hacer. Sólo escoge uno”. Y después confirmado por el flamante presidente de la gran corporación, que dijo que los gobernantes del país son unos corruptos, y si tienen gente como la alcaldesa de San Juan, pues menos todavía.
Hay que destacar que ahora tengo dudas si fue o no un buen ejemplo. Si hay alguna persona que es una hipócrita política, es la alcaldesa. Tiene una facilidad infinita para decir una cosa y hacer otra, que Dios se la guarde. Nada, hay quienes tienen sus quince minutos de fama. Perdón, ella tiene fama sólo porque le dijo a Trump lo que le tenia que decir. Algo que Kid Ricky debió haber hecho, pero por su ambivalencia, pues no lo hizo.
Por eso y otras muchas cosas, es que estamos como estamos.
Voy a darle un espacio al béisbol. Ya se están jugando las series post temporada de las Grandes Ligas. Las series de la Liga Nacional empezaron ayer. Los Dodgers y Milwaukee empezaron ganando. Hoy empiezan las series de la Liga Americana. Obviamente, la serie que más me interesa es la de Boston y New York. Aunque la de Cleveland y Houston va a ser otra serie interesante, pero se van a quedar en el camino. Las series en esta primera ronda son el que gane tres de cinco juegos.
Sentimentalmente, voy a Boston. Me gustaría ver a Alex Cora llegar a la Serie Mundial. Quizás, la serie menos llamativa es la de Milwaukee y Colorado, donde tampoco veo que alguno de ellos llegue a la final. Yo quiero ver a Boston contra Los Angeles en la final. Ahora mis amigos Yankees me van a caer encima.
En series cortas cualquier cosa puede pasar. Así que el que tenga la suerte y la racha es el que va a ganar. Ya en esta etapa no están jugando los “chongos” de la liga. Es la crema de la crema y todos los que están ahí han trabajado para ser campeones.
Después de todo, ya mi equipo se eliminó hace como tres semanas. Además, de que estoy molesto con ellos hace tres años por haberse inventado la excusa del Zica para no venir a jugar a Puerto Rico. Así que ya veremos si para el próximo año, los Piratas del Pittsburg, me vuelven a tener como fanático. Aunque no, como fanático no. Ahí me tengo que aplicar mi forma de pensar sobre los fanáticos.
Mi argumento sobre el fanatismo es el siguiente: ser fanático es sinónimo de brutalidad, porque te centras en un sólo punto de vista. No ves más allá. No razonas. No entiendes. Te limitas intelectualmente. Si hay alguna otra forma de decirlo, me lo pueden decir.