2 DE NOVIEMBRE DE 2018
Introducción
En realidad, sería interesante redactar una versión erótica de estos escritos. Después de todo, el que necesita algún tipo de atención, menciona alguna palabra relacionada, o se tira una foto en pelotas, la publica y le dan toda la atención del mundo. En la universidad, si estabas loco de vender los libros, hacías un anuncio con la palabra SEXO en un tamaño considerable, y en letras normales escribías, “Ahora que tengo tu atención, pues tengo estos libros para vender”. El sexo vende. De eso no cabe la menor duda. Si no, pregúntenle a par de personas que viven de eso y que tienen una exposición bestial en los medios de comunicación. ¿He dicho nombre yo?
El mercadeo es la ciencia de venderte cosas u obtener servicios que no necesitas. El consumismo en su máxima expresión. “Le vende una nevera a un esquimal”, eso dicen de la gente que tienen una labia, que Dios se la bendiga, para vender cosas. Ese es el mundo en el que vivimos. Mientras se promueva por los medios que lo que eres se mide por lo que tienes, estamos fastidiados. Como dice la canción de Bosé; “Tanto tienes, tanto vales”. Patético.
Sexooo, sexoooo…
El poder da beneficios. Mientras más poderoso eres, más beneficios puedes obtener en ciertas circunstancias. No necesariamente el poder lo obtienes si tienes dinero. Puedes tener poder si sabes algo de alguien. Puedes tener poder si tienes una posesión que otra persona necesite. Puedes tener poder si tienes una posición en la sociedad. Algo así como un alcalde.
Como no hablar de sexo, y no pensar en O’Neill. Ese caso esta feo y más feo se puso después de la publicación del libro que narra con lujo de detalles lo que pasaba en ese sacro santo lugar llamado alcaldía. Y no sólo era el alcalde. El hijo heredó sus instintos desenfrenados. De tal palo, tal astilla. Usaban la alcaldía de centro de terapia sexual. Hay que recordar que la alcaldía es un edificio nuevo. Así que la diseñaron con todas las facilidades habidas y por haber. Excelentes espacios de oficina, los baños enchapados, lugares para tomar alimentos, un palomar con una vista espectacular a la ciudad.
Y dicen que hasta un tubo había. ¿Qué de malo tiene eso? Que haya habido una falla en el diseño y tuvieran que poner un tubo de agua en el medio del edificio. Mal pensados. Antes de leer el próximo párrafo, estamos claros que no he leído el libro, pero lo que he escuchado de lecturas de este en la radio, esta descomunal las suciedades que pasaban en esa alcaldía.
Lo más brutal es que en las investigaciones que han salido a la luz, no había mujer que entrara a esa oficina que cayera rendida a los pies del alcalde. ¡Que talento! El atractivo del alcalde estaba brutal. Eso es un ejemplo de superación. Como una persona que es hojalatero de profesión, llega a ser alcalde de una de las ciudades más grandes del país y mientras más pasaban los años, su atractivo físico y feromonas se multiplicaban exponencialmente. Con un lenguaje florido y unos piropos ejemplares, tumbaba a toda mujer que quería. “Estas buena”, “Te voy a comer la c**a”, “Si quieres mantener el trabajo, me lo tienes que m***”, entre otros. La pregunta es, ¿era talento o era poder? Me voy por la segunda. Y el hijo iba por las mismas. Lo más descomunal es que después se hacen llamar honorables.
Ese caso esta a mitad. El dinero compra influencias y compra ciertas concesiones al momento de un proceso judicial. Esta semana la defensa del alcalde pidió llegar a un acuerdo para que el alcalde no pase ni un día en la cárcel. O sea, ¿quiere decir que la defensa esta admitiendo que es culpable? No sé, pero esa fue mi percepción. Tú no haces una petición de ese tipo, si no hay una gran posibilidad de que el veredicto sea en tu contra. Y si hizo lo que dicen que hizo, e hicieron un libro de que sí lo hizo, pues entonces, para el beneficio de la justicia, debe cumplir.
Toda acción tiene su consecuencia. El problema de este país, y otros países, es que los políticos se creen que están por encima de la ley. Que pueden hacer lo que le venga en gana y no les va a pasar nada. Aunque actualmente, bajo el sistema en el que estamos, hay mucha posibilidad de que eso ocurra, pero siempre hay un destello de que algo les salga mal a ellos y bien a nosotros. Esa es la esperanza que tenemos.
Pero eso querían, eso tienen.