Episodio CCCXXIV (324) – Eleuterio de vacaciones

18 de abril de 2020

Introducción

Como diría un comentarista deportivo; “Y van a seguirrrr”. La expresión viene porque en el día de ayer descubrieron unos nuevos vagones que estaban escondidos. Estos contenían comida y estaban a cargo del departamento de vivienda. Como siempre, nadie sabe nada, y nadie se responsabiliza o lo responsabilizan por nada. Por eso estamos como estamos. Y como siempre, los “más vulnerables” son los que se afectan. Les encanta usar ese estribillo, pero no se lo aplican. Sigan con el “chiji-chija”, entreteniéndose con los supuestos $500 que Wandocha nos va a dar, de no se sabe dónde. Estamos en campaña.

Eso querían, eso tienen.

Duelo

Hoy escrito corto, porque como siempre he dicho, los fines de semana se lee muy poco. Hoy voy a mencionar un suceso que, aunque ocurrió a principios de semana, todavía es la hora que no me recupero. Por causas relacionadas a la pandemia, el “lock down”, el toque de queda, la corrupción, el no hacer pruebas, entre otras cosas, cancelaron el programa vespertino yo escuchaba hace más de veinte y pico de años, Agitando El Show.

Ese proyecto que comenzó siendo de cinco minutos de “infomercial” de uno de los trabajos de Emmanuel Logroño, y que utilizaba a unos de sus personajes (Polito Garrapatoso) para anunciar un video del programa de Sunshine’s Café, programa que era muy visto en los años 90. Ese fue el comienzo de un programa que estuvo por todo el tiempo que mencioné anteriormente, excepto cuando pasó María, que estuvieron par de meses fuera por los problemas técnicos de la estación.

De cinco minutos, lo subieron a quince minutos. De quince minutos a media hora. De media hora a una hora y luego de dos horas. Siempre mantuvo su temática de crítica social, análisis “neutral”, que se entrelazaban otras secciones, unas más seguidas como, por ejemplo, “Video Exchange”, y otras no tan queridas, como el invento de “Bambalinas”.

También pasó mucha gente por el programa, como analistas y “analistos”. Hasta tuvieron el honor de tener panelistas que fueron acusados y que, al programa durar tanto, ahora están en la libre comunidad. En realidad, era una terapia después de concluir un día de trabajo escuchar a ese equipo permanente que tenían en el programa. El programa fue una finca de talentos, algunos buenos y otros que apestan. Recibían puñaladas de quien menos se esperaban, porque les daban la confianza, pasaban varios meses y a veces hasta años, y se le iban con todas las ideas que habían adquirido. Hasta tuvieron un individuo que les robo todo el pietaje de las secciones y, según ellos, las tiró por un puente. Eso los hacia especiales.

“El que se anuncia en Agitando, se hace millonario”. Ese era su eslogan de ventas. Hubo muchos que así lo hicieron. Espero que esta cancelación sea temporera. Extraño el análisis “neutral” del maestro, Eleuterio Quiñones. Ese estadista republicano, cuya doctrina era (bueno, es porque no se ha muerto), “hay dos formas de ver las cosas, la errónea y la mía”. Como dije, la sección de cine y la “Buchaca” los viernes.

A Nando ya lo escuché que continúa, pero como locutor raso, sólo, triste y abandonado. Espero no termine viviendo debajo del puente de Las Catalinas. “Sunshine” pues ahora está haciendo videos desenchufados por Facebook de los “éxitos” de los “Hombripollos” y otras agrupaciones subversivas en las que tuvo participación. Algo tiene que hacer ahora que esta encerrado en su casa. Ehhh, bueno, el programa siempre lo hizo encerrado en su casa. O sea, que la razón fue más económica de la estación que otra cosa. ¡Gracias por nada, coronavirus!

Sé que a muchos nos va a hacer mucha falta escuchar el programa en las tardes. No sólo en Puerto Rico, si no que fuera de la isla, gracias a la magia del Internet. Era mucha, pero mucha gente que se comunicaba desde los Estados Unidos y otras partes del mundo. Los más pintorescos llamaban de Washington, Texas (algo que tenia que ver con polvos), pero el más que odie en la historia de ese programa se identificaba como que era de Ponce. Aunque tenía una competencia seria en ese club de odio con uno de los miembros que en algún momento estuvo diariamente en el programa, ese ne*** se ganó el honor de ser el ganador en esa categoría. Quizás es lo único que no voy a extrañar del programa.

Sentida nota de duelo a “Agitando El Show”.

No queríamos eso, pero gracias a la pandemia, eso tenemos.

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